Un fondo cotizado en bolsa, más conocido como ETF (por sus siglas en inglés), es un fondo que puede ser operado en bolsa como una acción. Se trata de una canasta de acciones de las mayores empresas. La principal característica de dichos fondos es que cada uno de ellos se opera según el principio de acciones ordinarias, pero al mismo tiempo, contiene muchos valores de grandes empresas.

Los ETF te brindan una forma de comprar y vender una canasta de activos sin tener que comprar todos los componentes de manera individual. Funcionan de la siguiente manera: el proveedor del fondo es propietario de los activos subyacentes, diseña un fondo para hacerle seguimiento a su rendimiento y vende acciones de ese fondo a los inversionistas.

Para el inversionista, esta es una oportunidad garantizada de obtener un ingreso pasivo estable. Incluso si las acciones de una compañía comienzan a caer, el índice general no mostrará una disminución notable, lo que conducirá a una mayor confiabilidad de la inversión. Los riesgos son mínimos y puedes obtener ganancias pasivas de dividendos y por reventa.